martes, 1 de marzo de 2016

Más Voluntarios de Protección Civil

Leo continuamente en los medios de comunicación noticias de que los ayuntamientos se empeñan en la creación de agrupaciones de protección civil. Una de las últimas corresponde al Ayuntamiento de Salamanca que se encuentra en el proceso de constitución. Pero no es el único municipio que lo ha hecho, os aseguro que se trata de un hecho generalizado. Estimo que en el último año se han creado cerca de 50 nuevas agrupaciones. Preguntémonos por qué está pasando esto.

Y el Ayuntamiento de Logroño busca personas de más de 18 años para ser voluntarios de protección civil, que según dicen han duplicado sus actuaciones desde 2010.

No es de extrañar que el Alcalde de un pequeño municipio (y de los no tan pequeños) prefiera contar con una agrupación de voluntarios de protección civil que con un cuerpo de bomberos voluntarios; la versatilidad y la disponibilidad absoluta de los voluntarios y voluntarias de protección civil resulta sumamente atractiva (en el artículo “Voluntarios de Protección Civil” -publicado en este blog en julio de 2014- ya se indicaba la amplitud de las carta de servicios de los voluntarios de Protección Civil). Las corporaciones locales han ido descubriendo la conveniencia de invertir recursos en el voluntariado social y entre este voluntariado se encuentran las agrupaciones de Protección Civil. Son inversiones muy rentables para la sociedad a corto plazo.


Más agrupaciones y más actuaciones
En Cataluña el número de voluntarios municipales de protección civil aumentó en un año el 56%. Y no solo a nivel municipal, en Castellón se está desarrollando un modelo de voluntarios de protección civil provincial que puede ser imitado en breve. Y cubriendo cada vez más, una mayor parte de las emergencias.

Me encontré hace poco con una noticia que destacaba que las agrupaciones de voluntarios de protección civil de Huelva tenían más de 10.000 actuaciones solo en las playas en verano. ¡Diez mil actuaciones…, qué eficiencia! Eso es el doble que las intervenciones de los servicios de bomberos en toda la provincia de Huelva en todo el año.

Según ANAV (Asociación Nacional de Voluntarios de Protección Civil) tienen 1.300 agrupaciones asociadas y creen que son más de 500 las que no pertenecen a la asociación. Partiendo de este dato podemos realizar una estimación de alrededor de 50.000 voluntarios de protección civil en España, cifra nada desdeñable, muy superior al número de bomberos (el doble que los bomberos profesionales) y de miembros de emergencia sanitaria. Esto también es importante a nivel de mercado, pues disponen de más vehículos y unidades de rescate que los servicios de bomberos, y, por supuesto, compran el doble de uniformes o cascos o linternas.

Su secreto: crecen cada día más porque dan a la sociedad lo que la sociedad demanda.


Qué dicen los bomberos
Cuando a los bomberos profesionales se les pregunta sobre los voluntarios de protección civil, suelen decir, mirando para otro lado: "Bueno, eso es/son otra historia".

La Historia trata de los sucesos, hechos y acontecimientos que ya han sucedido y lo que ocurre en el mundo de los voluntarios de protección civil y sus agrupaciones, es una realidad creciente y actual y cada día más consolidada. No es historia, es presente y futuro, aunque no haya datos oficiales -ya se sabe que la Dirección general de protección civil y emergencias no tiene datos, ni de la protección civil ni de las emergencias en España-.


La causa
Creo que hay dos razones principales para que se produzca este desarrollo de las agrupaciones de protección civil en España:
-      La primera ya mencionada, es la poca carta de servicios de Bomberos en la emergencia. Los voluntarios de protección civil son más versátiles, lo mismo buscan personas perdidas en el monte, que salvan un delfín en una playa, o ponen pulseras a los niños en un acontecimiento multitudinario. Muestran una mayor disposición a salir de su base y a hacerse visibles ante los ciudadanos. Y lo que es mucho más importante, desarrollan muchas más tareas preventivas que un bombero.

-      La segunda es el modelo español de "Bomberos" altamente profesionalizado y con escaso espacio para el voluntariado, lo que está suponiendo, en contra de lo que podría parecer, una pérdida de protagonismo en la emergencia.

Además, el voluntariado de protección civil tiene un marco jurídico en el Estado, recogido en la Ley 45/2015, de 14 de octubre, de Voluntariado, mientras que el voluntariado de bomberos no lo tiene.

Presente y futuro
No hay que ser muy ilustrado para saber cuál es la tendencia universal con el voluntariado: ¡Cuanto más mejor! Más bien, hay que ser bastante tonto, para no darse cuenta o peor aún negar la realidad. Y sin embargo, en España, se ha instalado entre los sindicatos el fundamentalismo en contra del voluntariado en los servicios de bomberos, lo que a la larga puede suponer como se dice coloquialmente “cavar la propia tumba”.

Lo inteligente podría ser que los Servicios de bomberos se adaptasen a las realidades de la sociedad de hoy. La alternativa es pasar a ser "Historia".

Pero, no veo yo ratón capaz de poner cascabel a este gato, y menos aún si los ratones están ciegos.

7 comentarios:

  1. Buenas tardes Javier,
    Mi nombre es Rubén Ramón, soy voluntario de Protección Civil en la agrupación de Manacor (Mallorca) con el cargo de jefe de la agrupación.
    Es evidente que el número de voluntarios no para de crecer y no tiene visos de que esta tendencia vaya a disminuir. En mi opinión, lo esencial no debería ser el número, sino la preparación y/o formación del voluntariado y su dotación, tanto en EPIS como medios materiales, para poder especializar a cada uno, en uno de los servicios de la carta de servicios que mencionas.
    Por otra parte, no hay que olvidar una situación que tampoco para de crecer, que es el uso y abuso del voluntariado que se hace por parte de los ayuntamientos para economizar partidas presupuestarias, incumpliendo por ejemplo la LBRL, en un intento de sustituirnos por bomberos o policías locales, cuando ni formativa, ni práctica ni por dotación de EPIS, no podemos ni deberíamos asumir la ejecución de determinadas tareas, por lo que ello nos conlleva a muchos conflictos. No debemos pasarnos de voluntariosos, ni tampoco olvidar las funciones asignadas a las agrupaciones en los Planes Territoriales de Protección Civil.
    Tampoco hay que olvidar además, el uso y abuso de este colectivo en determinados eventos PRIVADOS Y CON FINES LUCRATIVOS, a los que las agrupaciones están llamadas a colaborar, pues hay que recordar que estamos financiados con fondos públicos, con lo que se podría invocar a cierto artículo del Código Penal, y aquí lo dejo... pues entiendo que, por ejemplo, una prueba deportiva no supone ningún riesgo de catástrofe o calamidad pública.
    Por tanto, y hablando sin entrar a analizar agrupación por agrupación, y las necesidades de cada uno de sus municipios, estamos demasiado orientados a la intervención en la emergencia ordinaria, cuando estamos descuidando demasiado la preparación para la emergencia extraordinaria, en aspectos tan elementales como por ejemplo la logística o la previsión y prevención de riesgos, ya que, sea por desidia administrativa o por desconocimiento de la LBRL, los ayuntamientos incumplen sistemáticamente dicha Ley, con lo que el estudio del riesgo de los municipios queda a merced del "quien iba a pensar que ocurriría esto..." o por contra que alguien se digne voluntariosamente a realizar una catalogación de riesgos municipales con cierta seriedad, y que para más INRI alguien lo vería como una injerencia en sus competencias y que, por otra parte, nadie nunca se ha dignado a realizar...
    Bueno, no me extiendo más para no aburrir a nadie. Reciban compañeros de este colectivo, un cordial saludo.

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    1. Hola Rubén, gracias por tus comentarios,
      Tienes todas la razón en dar mucha importancia a la formación, es básico estar formado/a para poder atender a los ciudadanos en emergencias. Lo importante para el ciudadano atendido no es si el socorrista cobra o no cobra sino si sabe o no sabe hacer la tarea.
      También tienen razón en el mal uso que algunas administraciones pueden hacer cuando pretendan sustituir a los profesionales, pero yo creo que hay muchos espacios en los que tiene cabida el voluntariado como valor añadido y complemento de los servicios profesionales y para llegar a donde estos no llegan y no llegarán nunca (de la misma manera que nunca habrá un hospital en una aldea de montaña de 50 vecinos, lo que no ha de impedir que haya algún socorrista voluntario formado y diestro en prestar primerros auxilios).
      También tienes razón en su utilización en eventos privados (estadios, conciertos, etc)que tienen grandes presupuestos y grandes ingresos que pagan por todos los serviicos que contratan pero el ayuntamiento les pone gratis a los voluntarios de protección civil cuando la seguridad del espectáculo es una responsabilidad de los organizadores.
      Comparto que hay que tener en el horizonte las emergencias que desbordan las situaciones ordinarias, aunque no llegen a ser catástrofes. En los momentos en que los servicios públicos de emergencia están superados por los acontecimientos, es cuando el voluntariado de emergencia será de excepcional valor, sin olvidar que lo que no se entrena a diario no se sabrá hacer cuando se necesite, por lo que hay que tener presente que también hay que dar espacios de actividad en lo cotidiano, para que cuando llegue el momento tengamos engrasada la maquinaria.
      Creo que las administraciones españolas (casi todas) no se han tomado en serio la planificación de las grandes emergencias y apenas existe coordinación planificada de que hacer en una catástrofe sobrevenida de forma repentina. Creo que a muchos lo único que se le ocurrirá será: "llama a la UME".
      Al día siguiente del terremoto de Lorca fui corriendo y estuve un par de días de observador. Aún no me he atrevido a contar mi versión de lo que vi. Hace un par de años se celebraron en Lorca unas jornadas en que los organizadores iban a explicar "qué hicimos bien, qué salió mal" cuando lo que deberían haber hecho es un poco de autocrítica y haber contado "qué hicimos mal, qué salió bien".
      Un saludo,

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  2. Yo coincido con Rubén Ramón en que muchas veces se desvirtúa el origen por el cual se crea la protección civil, dar una respuesta a las graves emergencias, por cubrir el día a día. Coincido ademas en que hacer de bomberos y sanitarios tiene su complejidad, por la especialidad que tienen ambas labores. Coincido con Javier en que el sistema de emergencias esta trabado, (por decirlo de alguna manera). Por una legislación inexistente como en el caso de bomberos o por hacer decretos y que los cumplan como puedan como en el caso del decreto de técnico en emergencias sanitarias, El amplio campo de actuación de las agrupaciones de protección civil, es un arma de doble filo para sus integrantes y una solución para los que intentan cubrir el vacío existente en muchas situaciones de cobertura diaria de eventos y emergencias. Ademas creo que el voluntariado de PC esta siendo alimentado por el voluntariado sanitario que esta siendo reemplazado en muchas partes por empresas privadas tercerizadas por los gobiernos autonómicos y municipales. Visto este panorama, no queda mas remedio que apuntarse en la protección civil, dado que sanitario no puedes ser y bombero menos. Es totalmente lógico que se propague esta forma de voluntariado. Como se propaga la UME por todo el estado. Modelos sencillos, maleables, fáciles de gestionar y de organizar. Queda mucho por hacer para aprovechar ese tremendo potencial humano. Saludos.

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  3. Muy acertadas tus apreciaciones Daniel,
    Las CCAA están externalizando las ambulancias, también las de emergencias y se ha perdido una oportunidad de oro para integrarlas en los servicios de bomberos, como están en casi todo el mundo. En parte por el negocio que supone para algunas empresas, y por la visión corporativa de algunos y por la pasividad de otros y por si fuese poco, por la complejidad que ha añadido la cualificación TES. El caso es que es así, y como bien explicas ya apenas queda espacio para el voluntariado en la emergencia sanitaria. Y algunos movimientos de bomberos profesionales quieren arrinconar a los bomberos voluntarios, asi que el gran escenario para el voluntariado de emergencias es la protección civil, que es muy amplio, versátil y difuso. Si ha de ser así, bienvenido sea, pero que se haga con orden y con regulación. Hace unos años declaré que el mayor problema de la emergencia en España es la "falta de regulación" y sigo pensando lo mismo. La reciente Ley de protección civil del estado es un buen ejemplo de la no regulación de la emergencia, sus autores tomaron la decisión de quitar de la Ley anterior todo lo que les parecía dificil de regular y así seguimos.
    Saludos,

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    1. Es muy preocupante el tema, porque esta todo tan diversificado que es casi imposible gestionarlo operativamente, ¿podemos enviar 200 bomberos como apoyo a otra comunidad autónoma de inmediato? ¿podemos contar con 30 ambulancias dentro de las primeras dos horas de ocurrido un incidente? No estoy hablando de algo grande, estoy hablando de un IMV local, ¿Podemos? ¿La ambulancia "profesional" esta de traslado, podemos atender un infarto con voluntarios certificados de manera inmediata? En casi todas partes en donde existe una gestión adecuada todas estas respuestas son un SI, nosotros estamos esperando......... tal vez ese "algo" nos sorprenda y no tengamos tiempo de reaccionar, sera la peor forma de aprender una lección que ya debíamos saber desde hace mucho.

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  4. Daniel,
    La respuesta a tus preguntas es: en España NO.
    Así es el país y así sus paisanos. Es sorprendente que a pesar de todos los fallos y defectos que nosotros vemos, seamos uno de los países más industrializados del mundo y de los selectos con buena renta per capita (aunque esté muy mal distribuida). Quizás esto de las emergencias no sea tan importante, al menos no tanto como la liga de fútbol profesional. Saludos.

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